¡Un saludo y bienvenidos a La Bandera de la Libertad!
Semana "nueva", Finde de Cine nuevo... a pesar de que últimamente lo estemos publicando más bien a mitad de semana... Pero al menos lo publicamos, ¿no? ^^.
El caso es que seguimos con nuestra sección de cine japonés semanal. En esta ocasión hablaremos de la película Ren a Cat, de Naoko Ogigami, una directora muy interesante que acabamos de conocer y cuyas películas de comedia ligera costumbrista nos han llamado mucho la atención. Y por otro lado, habréis visto ya que ayer publicamos un especial hablando de las 4 últimas películas de la serie Showa de Godzilla, así que como ya hemos acabado con esa primera etapa del personaje, no hemos podido aguantar más las ganas de ver por fin la última entrega, Shin Godzilla, que tanto éxito ha tenido.
¡Empecemos!
Rent a Cat
Para empezar tenemos la película Rent a Cat (Rentaneko), una curiosa comedia ligera costumbrista estrenada en Japón en 2012 y dirigida por Naoko Ogigami, directora que desde su debut en 2004 con el largometraje Yoshino's Barber se ha ido especializando en este género. La directora no parece haber alcanzado hasta ahora demasiado reconocimiento internacional, pero a nosotros, que somos grandes amantes del costumbrismo japonés, nos ha atraído mucho su aún escasa filmografía. Como curiosidad, Mikako Ichikawa, la actriz protagonista de Rent a Cat, también aparece en uno de los papeles más destacados en nuestra otra película de hoy, Shin Godzilla, aunque esto fue pura casualidad, nada premeditado.
<< Rent a Cat centra su historia en una joven solitaria que tiene un negocio de alquilar gatos a la gente durante un tiempo para que aclaren sus vidas e ideas. Esta joven vive una vida bastante antisocial hasta que aparece en ella una persona de su pasado, "sacudiendo" su aislamiento autoimpuesto.. >>
Como decíamos, descubrimos a Ogigami como de casualidad buscando películas interesantes, y si decidimos inclinarnos por Rent a Cat fue, más que nada, por los gatos. Muy básico, ¿no? xD. Al fin y al cabo, el tema de los gatos en Japón ya sabemos todos que siempre está muy presente con cosas como los cat café, y el concepto de esta película no dista tanto de ello: la compañía y contacto con un animal doméstico como los gatos para liberar estrés o combatir problemas psicológicos o la soledad.
Y la verdad es que si todos sus filmes son de este estilo (y eso parece), es todo un descubrimiento. La primera mitad de la película respira paz y tranquilidad, como todo buen costumbrismo. Se basa en escenas en las que vemos a la protagonista caminando por la ciudad y buscando gente solitaria a la que considere que le vendrá bien alquilar a un gatito para aliviar sus penas. Vemos la situación de esas personas, los motivos por los que quieren un gato que les haga compañía, etc. Todo ello con un ligero toque cómico que hace muy agradables las historias que se narran.
Se podría decir que esa es la mejor parte de la película, pues en la segunda mitad pasa a una comedia algo más histriónica para nuestro gusto, aunque tampoco de forma excesiva. La extravagante y asocial protagonista toma mayor papel en el desarrollo del filme, y con ello se pierde un poco la gracia de la estructura casi episódica de la primera parte.
Es, en definitiva, una comedia ligera costumbrista muy recomendable a pesar del altibajo que sufre hacia la mitad, con buena ambientación, una atmósfera muy agradable... y gatos adorables durante toda la película.
Y la verdad es que si todos sus filmes son de este estilo (y eso parece), es todo un descubrimiento. La primera mitad de la película respira paz y tranquilidad, como todo buen costumbrismo. Se basa en escenas en las que vemos a la protagonista caminando por la ciudad y buscando gente solitaria a la que considere que le vendrá bien alquilar a un gatito para aliviar sus penas. Vemos la situación de esas personas, los motivos por los que quieren un gato que les haga compañía, etc. Todo ello con un ligero toque cómico que hace muy agradables las historias que se narran.
Se podría decir que esa es la mejor parte de la película, pues en la segunda mitad pasa a una comedia algo más histriónica para nuestro gusto, aunque tampoco de forma excesiva. La extravagante y asocial protagonista toma mayor papel en el desarrollo del filme, y con ello se pierde un poco la gracia de la estructura casi episódica de la primera parte.
Es, en definitiva, una comedia ligera costumbrista muy recomendable a pesar del altibajo que sufre hacia la mitad, con buena ambientación, una atmósfera muy agradable... y gatos adorables durante toda la película.
Shin Godzilla
Y cerrando por todo lo alto, siguiendo con nuestro ciclo de kaiju-eiga, finalmente hemos sucumbido a la tentación de Shin Godzilla. No queríamos verla hasta conocer bien la saga, y aunque aún nos quede casi la mitad, al haber finalizado con la primera gran época (y la más importante) del personaje, creímos que era un buen momento para ver esta nueva entrega, que además es el primer reboot total que se hace en los 63 años de existencia del monstruo. Estrenada en 2016, en clara respuesta de la Toho a los americanos para demostrar lo que es realmente una película de Godzilla después de la de Legendary de 2014, el afamado Hideaki Anno (Evangelion) y Shinji Higuchi (live actions de Ataque a los Titanes) se ponen a la cabeza de la legendaria saga para dirigir su 29ª entrega japonesa e iniciar una nueva era. Una actualización de la película original de Ishiro Honda de 1954, el Godzilla más grande jamás creado, un reparto de primera fila (que incluye actores como Ren Osugi o Jun Kunimura) y la recuperación del espíritu original de la saga... ¿Qué podría salir mal?
<< Godzilla, fuerza destructiva insondable para el hombre, surge en el Tokio de hoy en día para acosar a la civilización. Un país aún atormentado por las secuelas de un desastre natural experimenta de repente el horror catastrófico de Godzilla. Apremiado por la muerte y la desesperación, Japón deberá encontrar el poder para superar este desafío. >>
¿Y qué podemos decir? Pues yendo directamente al grano, Shin Godzilla resulta ser una de las mejores películas de la franquicia, llegando a ser capaz de rivalizar incluso con la original de 1954.
Esta nueva película es un reboot total de la saga (algo insólito, pues hasta ahora todas las películas japonesas se habían concebido como una especie de secuela de, al menos, la original), a la vez que una actualización
del argumento, estilo y esencia de la película de Ishiro Honda a los nuevos tiempos.
Y es que Shin Godzilla presenta, por primera vez en décadas, un kaiju-eiga centrado no en el propio monstruo ni en sus luchas contra otros kaijus, sino en la gestión política de la crisis sin precedentes que su aparición supone para el país. El protagonismo regresa a los despachos y al gabinete de crisis, que tratará de hacer frente como buenamente pueda a una criatura que está arrasando la capital y cobrándose las vidas de millones de personas.
Además, si el Goji original de 1954 encarnaba el horror de los bombardeos atómicos de Hiroshima y Nagasaki y el temor de la población ante las pruebas atómicas del ejército estadounidense en aguas niponas durante la ocupación militar de la posguerra, este Shin Godzilla es el miedo a la dependencia de una fuente de energía tan potencialmente peligrosa como la nuclear, un asunto aún en carne viva desde el desastre de Fukushima.
En cuanto al monstruo... por primera vez en los más de 60 años de historia de la saga, Godzilla no es un traje, sino una
combinación de animatrónicos y, sobre todo, efectos especiales con captura de movimiento. Y el resultado no podía ser más espectacular. Es
el Godzilla más grande (más que el de Legendary) y fiero que hemos tenido hasta ahora. Y cabe destacar especialmente las escenas en las que escupe su
característico rayo radiactivo, absolutamente son impresionantes.
Además hay que mencionar la acertada visión en la reconcepción del kaiju, pues no es "simplemente" un lagarto gigante, sino una criatura que va mutando y evolucionando, adaptándose al medio y a sus necesidades para causar la máxima destrucción posible, cosa que da
mucho juego a la película.
Shin Godzilla es mucho más que una vuelta a los orígenes: es el mejor homenaje
posible a una gran franquicia y un soplo de aire fresco. Esperamos tener
más entregas como esta a lo largo de esta incipiente cuarta era, porque ha sido simplemente impresionante. De las
mejores (si no la mejor) hasta ahora.
Y hasta aquí nuestro Finde de Cine de esta semana. Esperamos que os haya gustado, que os animéis a compartir vuestras impresiones sobre las películas si las habéis visto o que, en caso de que no, estas mini reseñas os convenzan para verlas.
¡Hasta la próxima!
No hay comentarios:
Publicar un comentario