miércoles, 30 de marzo de 2016

[RESEÑA MANGA] Hellstar Remina



Hola a todos y bienvenidos de nuevo a La Bandera de la Libertad

Como podéis ver, aquí estamos un día más con una de nuestras reseñas de manga. Concretamente, hoy vamos a hablar de un manga "menor" del gran maestro del terror japonés Junji Ito: Hellstar Remina (Jigokusei Remina).

Publicada originalmente en Japón en 2005 y recopilada en un único tomo, Hellstar Remina fue publicada en España recientemente por la editorial ECC.

Junji Ito, genio del terror

Junji Ito, nacido en 1963, es uno de los más importantes maestros del manga del género de terror del panorama contemporáneo.

Inspirado desde niño por las ilustraciones de su hermana mayor y fascinado por las obras del indiscutible rey del terror, Kazuo UmezuJunji Ito se decidió finalmente en 1987 dejar su carrera como técnico dental y lanzarse al mundo del manga, presentando una historia corta a la revista Gekkan Halloween, que acabó recibiendo una mención honorífica en el Premio Kazuo Umezu, entre cuyo jurado se encontraba el mismísimo maestro.

Ese mismo, Ito empezó a publicar las historias que acabarían componiendo una de sus sagas más conocidas, Tomie, que no finalizaría hasta el 2000, a pesar de su escasa extensión.

Entre 1998 y 1999 llegaría al fin la que se convertiría en su mayor obra maestra hasta la fecha y una de las obras más icónicas del manga de terror, Uzumaki (literalmente, Espiral), que le catapultaría a la fama internacional.

Es también especialmente popular dentro de su producción el manga sobre la invasión de unos misteriosos y fétidos peces con patas, Gyo, que fue recientemente adaptado a la animación como película, recibiendo una mediocre acogida por parte del público.

Entre sus grandes influencias, Junji Ito menciona, además de a Kazuo Umezu (Aula a la DerivaBaptism...), a Hideshi Hino (Panorama InfernalEl Niño Gusano...), otro de los maestros del género; al novelista Yasutaka Tsutsui (PaprikaLa chica que saltaba a través del tiempoEstoy desnudo...); o al gran escritor occidental H.P. Lovecraft

El estilo de terror de Junji Ito se caracteriza por la progresiva degeneración de los acontecimientos, que van volviéndose con el transcurso de la historia más y más descontrolados y sobrenaturales, sometiendo a los personajes y al lector a una presión psicológica y a una asfixiante atmósfera de la que no se puede escapar.

Entre sus obras cabe mencionar también Hellstar Remina (Jigokusei Remina), el recopilatorio de historias cortas Fragmentos del Mal (Ma no Kakera) o Black Paradox.

¿De qué trata?

La historia comienza con un famoso científico que, tras descubrir un planeta misterioso, decide ponerle el nombre de su hija, Remina.

Remina se convierte en una celebridad a raíz del hallazgo de su padre y del nombre que comparte con el recién descubierto planeta, cosa que no termina de agradarle.

Sin embargo, todo se tornará macabro cuando se descubra que el planeta se acerca cada vez más a la Tierra, y que este parece poseer vida propia...


Nuestra Opinión

A pesar de no ser de las más grandes y mejores obras de Ito, Hellstar Remina no deja de ser un manga de terror bastante decente.

Su historia no es especialmente buena, ni tampoco presenta en exceso (aunque tampoco se puede decir que esté totalmente ausente) el característico delirio al que nos tiene tan acostumbrados Junji Ito y con el que logra recrear sus terroríficos y asfixiantes ambientes, pero sí resulta lo suficientemente macabra y oscura como para mantener pegado al lector a sus páginas hasta el final.

Se trata de una lectura ligera, una historia corta y sencilla sin demasiada complicación. Aunque tampoco tiene nada especialmente destacable hasta su final, sí que hay que reconocer que este, sin ser una maravilla, es un clímax intenso y bastante acertado.

El dibujo de Ito brilla especialmente en las imágenes del planeta Remina, ofreciéndonos unas páginas detalladas y espectaculares que impresionan y ponen los pelos de punta a la vez.

En resumidas cuentas, podríamos decir que Hellstar Remina es un manga "menos" Ito, en tanto que no presenta una historia tan delirante como en sus grandes obras, pero aun así sigue siendo una historia macabra con un impresionante final muy disfrutable para los amantes de Junji Ito en particular y del manga de terror en general.


[ - Valoración: Bueno - ]

viernes, 25 de marzo de 2016

[RESEÑA ANIME] El Niño y la Bestia



Hola a todos y bienvenidos una vez más a La Bandera de la Libertad.

Como ya estáis viendo, hoy vamos a hablar de una película recientemente estrenada en Japón (y dentro de unas semanas también en cines españoles), la última obra del gran director Mamoru Hosoda, que además pasa por ser su mejor película hasta el momento: El Niño y la Bestia (Bakemono no Ko), estrenada el pasado 2015.

Mamoru Hosoda, el director

Mamoru Hosoda, nacido en 1967, se ha convertido en los últimos años en uno de los más importantes directores de animación del panorama de la animación japonesa contemporánea.

Tras decidir convertirse en director al ver en su infancia la película Lupin III: El Castillo de Cagliostro, de Hayao MiyazakiHosoda se esforzó hasta lograr entrar en el estudio Toei una vez finalizados sus estudios. Allí comenzaría a llamar la atención con su muy remarcable trabajo con las películas de Digimon Adventure (1999) y Digimon Adventure: Bokura no War Game (2000).

Fue así como el prestigioso Estudio Ghibli le buscaría para que se hiciera cargo de la adaptación animada de la novela europea El Castillo Ambulante. No obstante, la pretendida autosuficiencia de Hosoda le saldría cara al no querer pedir ayuda para la realización del storyboard, lo que le llevó a no ser capaz de cumplir los plazos. Por ello, Ghibli prescindió de Hosoda, siendo finalmente el propio Miyazaki quien se haría cargo del proyecto.

Creyendo que su carrera estaba acabada y que ningún estudio volvería a confiar en él, Hosoda regresó a Toei. Sería con la dirección del episodio 40 de la serie Magical DoReMi con la que el director volvería a llamar la atención, en esta ocasión de Masao Maruyama, productor y cofundador del estudio MADHOUSE.

Gracias al patronazgo de MaruyamaHosoda consiguió la oportunidad que tanto esperaba y que le lanzaría al estrellato: la dirección de la película La Chica que Saltaba a Través del Tiempo (Toki wo Kakeru Shojo), en 2006. Esta película, junto con Summer Wars en 2009 y Wolf Children (Ookami Kodomo no Ame to Yuki) en 2012, convertirían a Mamoru Hosoda en uno de los directores más prestigiosos de la actualidad. Su nueva película, El Niño y la Bestia (Bakemono no Ko), estrenada en 2015 en Japón, batió sus propios récords en taquilla, convirtiéndose rápidamente en el filme que le garantizó a Hosoda la consideración internacional de "genio de la animación".

¿De qué trata?

La película nos cuenta la historia de Ren, un niño que tras perder a sus padres, escapa de casa para acabar por accidente en Jutengai, una ciudad habitada por monstruos donde Kumatetsu, uno de los dos candidatos a suceder al Venerable de la ciudad (que va a retirarse para reencarnarse en dios), le tomará como discípulo.

Ren adoptará el nombre de Kyuuta, dado por su maestro, y empezará a aprender de él y a crecer bajo su tutela, conviertiéndose en uno más de los habitantes de Jutengai. Sin embargo, algo en su corazón le hará volver al mundo que abandonó en su niñez...

Nuestra Opinión

Empezaremos yendo directos al grano: estamos ante la mejor obra que ha concebido hasta la fecha Mamoru Hosoda, y no solo eso, sino que podríamos encontrarnos una de las mayores obras maestras de la animación de los últimos años.

La historia nos muestra la infancia y adolescencia de Kyuuta en Jutengai, aprendiendo de Kumatetsu y convirtiéndose no solo en su aprendiz, sino en su mejor amigo y en una especie de hijo para él.

Además, el mundo de los monstruos está presentado de una forma magistral, creando un pequeño universo que deja ver sus costumbres, modo de vida, organización social...

La película es tremendamente entrañable: la historia es emotiva, y puede tanto arrancarte una lágrima como sacarte una sonrisa o incluso una carcajada.

Los personajes están perfectamente construidos y el desarrollo argumental combina un ritmo pausado sin resultar lento y con un brillante progreso que mantiene atrapado al espectador de principio a fin.

Las escenas de acción tampoco dejarán a nadie indiferente, estando presente en diversos momentos de la cinta, siendo escenas que no son solo batallas, sino que transmiten y presentan un gran significado que llega al espectador como pocas películas han logrado.

Todos estos elementos se combinan para llegar a un clímax brillante que da ganas de levantarse de la silla y aplaudir el gran trabajo de Hosoda, quien en esta película termina de consagrarse como uno de los mas grandes directores de animación japonesa, y que esperamos que en los próximos años nos brinde obras iguales o mejores que esta.



Nota Final: 10 [ - Imprescindible - ]

jueves, 17 de marzo de 2016

[RESEÑA ANIME] La Arcadia de mi Juventud: Órbita Sin Fin SSX



Un saludo a todos y bienvenidos un día más a La Bandera de la Libertad

Como podéis apreciar, la reseña que os traemos hoy no es "una más", sino que esta vez va en consonancia con la temática del blog. Reseñamos una de las series principales de nuestro amado Leijiverso, parte de la saga del pirata espacial Harlock. Se trata de Waga Seishun no Arcadia: Mugen Kidou SSX (también conocida como Arcadia of My Youth: Endless Orbit SSX, La Arcadia de mi Juventud: Órbita sin Fin SSX).

Emitida entre octubre de 1982 y marzo de 1983, esta serie de 22 episodios es una continuación directa de la película La Arcadia de mi Juventud, ya reseñada en el blog, estrenada solo unos meses antes en cines japoneses. En su conjunto, la saga La Arcadia de Mi Juventud constituye una precuela de la serie original del Capitán Harlock (cuyo manga también reseñamos hace unos meses).

Leiji Matsumoto, maestro de la space opera

Nacido en 1938, Leiji Matsumoto (cuyo verdadero nombre es Akira Matsumoto) debutó profesionalmente en 1954 con Mitsubashi no Bouken. En sus primeros años de carrera se especializó en el manga para chicas, pero no tardaría mucho en conquistar otros géneros, hasta llegar, en la década de los 70, a la ciencia ficción de tipo ópera espacial, el género que le consagraría rápidamente como uno de los más grandes autores de la historia del cómic japonés.

En 1974 se estrenaba, de manera simultánea como manga y como anime, la que sería una de sus tres obras principales, la mítica Uchuu Senkan Yamato (Space Battleship Yamato). Poco después, en 1977, el maestro daría inicio a sus otras dos grandes creaciones: Ginga Tetsudo 999 (Galaxy Express 999), probablemente su serie más querida por el público japonés, y Uchuu Kaizoku Captain Harlock (Space Pirate Captain Harlock), especialmente conocida en Occidente. Además, publicaba ese mismo año también Queen Emeraldas, protagonizado por la hermosa Emeraldas, alter ego femenina de Harlock y gran amiga suya.

Con el paso de los años, sus obras han ido recibiendo múltiples adaptaciones al anime que han expandido inimaginablemente el ya conocido como "Leijiverso", en el que las diferentes series van entrelazándose narrando una gran épica de corte romántico con el vasto mar de estrellas que es el espacio como telón de fondo.

Además de las adaptaciones y spin-offs de sus propios mangas, en el campo de la animación Matsumoto también ha creado obras como la película musical Interstella 5555, con las canciones del grupo francés Daft Punk.

Además, entre las obras de Leiji Matsumoto podemos encontrar otras como 1000-nen Joou (Queen MillenniaLa Reina de los 1000 Años), Gun FrontierSubmarine Super 99Cosmo Warrior ZeroOzmaDNA Sights 999.9, entre otras muchas.

¿De qué trata?


En la serie, Harlock, Tochiro y Emeraldas se embarcan en un viaje por el infinito mar de estrellas que es el espacio para acabar con los illumidas, que dominan la Tierra, y encontrar  su propia Arcadia.

Durante el viaje conocerán a nuevos personajes que se unirán a su tripulación y con quienes establecerán lazos y les acompañarán en sus futuros viajes por el universo, como el joven Tadashi Monono o Yuki Kei.



Nuestra Opinión

No exageraríamos al decir que este es uno de los mejores animes del Leijiverso, pues probablemente es donde el espíritu poético, romántico y melancólico del capitán queda mejor plasmado. La serie tiene un ambiente espectacular que atrapa totalmente al espectador, equiparable al del manga original.

Todo ello acompañado por una banda sonora tan épica como hermosa, como es costumbre en los animes basados en la obra del maestro Matsumoto, así como una animación y apartado visual muy destacables para su época, transportándonos totalmente a la Arcadia del Capitán Harlock.

Otro gran punto a favor es que resulta terriblemente fácil encariñarse con los personajes, pues durante las aventuras que conforman la serie, uno los va conociendo más y sintiéndose parte de ellos.

Esto último se ve especialmente acentuado en el caso de Tochiro, personaje que nos era presentado en el manga original como el difunto mejor amigo del Capitán y constructor de la Arcadia y que en esta serie brilla más que nunca. La serie nos muestra un Tochiro perfectamente construido, que justifica totalmente las emociones del capitán al  recordarle en la obra original, un gran hombre que luchó por su tripulación y por su amada Emeraldas, sacrificando todo lo que tenía, hasta el mismísimo final.

En relación con ello, podemos afirmar sin amago de duda lo mejor del anime son esos últimos episodios, la recta final de la serie, de gran crudeza emocional, en los que asistimos a la anunciada muerte física de Tochiro y su fusión con su obra maestra, la Arcadia. Son unos episodios que ponen los pelos de punta por su belleza y melancolía.

Un anime excelente, gran BSO, animación, diseños, ambientación, personajes (a destacar Tochiro) y con un estilo melancólico y romántico que enamora.

Una absoluta obra maestra de la animación. Aunque, eso sí, más disfrutable conociendo previamente los acontecimientos y a los personajes de la obra original.


Nota Final: 10 [ - Imprescindible - ]

martes, 15 de marzo de 2016

[RESEÑA ANIME] Stand By Me Doraemon



Saludos a todos y bienvenidos un día más a La Bandera de la Libertad.

Volviendo a nuestras habituales reseñas, hoy hablaremos de una reciente película de animación basada en el archiconocido manganime infantil de Fujiko F. Fujio Doraemon. Se trata, como ya habéis podido comprobar, del fantástico filme con animación en 3D-CGI Stand By Me Doraemon.

Estrenada en Japón en el año 2014 y dirigida por Takashi Yamazaki y Ryuichi Yagi, Stand By Me Doraemon fue producida a modo de homenaje por el que habría sido el 80º aniversario del nacimiento de Hiroshi Fujimoto, quien, junto con Motoo Abiko y bajo el seudónimo de Fujiko Fujio (Fujiko F. Fujio tras la separación del dúo), creó al mítico gato cósmico.

Fujiko Fujio (Hiroshi Fujimoto y Motoo Abiko), reyes del kodomo

Bajo el seudónimo conjunto de Fujiko Fujio se encontraban dos autores fundamentales de la historia del manga moderno, Hiroshi Fujimoto (1933-1996) y Motoo Abiko (1934), consagrados como los grandes creadores de kodomo manga o manga infantil (si bien no la totalidad de su obra se dirige a los más pequeños).

Tras conocerse en el colegio, ambos amigos, que compartían una gran pasión por el manga, debutaron en 1951 con Tenshi no Tama-chan, tras lo cual, en 1954 y con la ayuda y consejos de Osamu Tezuka, se mudaron a Tokio, al mítico edificio de apartamentos Tokiwa-Sô, donde coincidirían con muchos de los más importantes autores que acabarían sentando las bases del manga, como Shotaro Ishinomori, Fujio Akatsuka o Hideko Mizuno

El primer gran éxito en el campo del manga para niños fue Obake no Q-Taro (1964-1973), que además se convertiría en la primera de sus obras en recibir una adaptación animada para televisión. 

Pero no sería hasta 1969 cuando los Fujiko Fujio crearon su obra más mítica, convertida a día de hoy en uno de los mayores iconos de la cultura popular japonesa, Doraemon. Las aventuras del entrañable gato robot azul experimentarían un primer y fracasado intento de adaptación al anime en 1973, pero ya en 1979 se estrenaría el las televisiones japonesas la serie que se prolongaría durante décadas, hasta que en 2005 fue renovada con un nuevo estilo visual más acorde con el manga original. A día de hoy, la serie sigue emitiéndose cada semana, así como los largometrajes anuales, que ya suman más de una treintena.

Entre las demás creaciones de corte kodomo de Fujiko Fujio encontramos Ninja Hattori-Kun (1964-1971), Kaibutsu-kun (1965-1969), Parman ((1967-1968), Kiteretsu Daihyakka (1974-1977) o Esper Mami (1977-1982).

No obstante, no toda la obra de este legendario dúo se dirigía al público infantil, pues encontramos también mangas seinen como la comedia Warau Salesman (1969-1971), la autobiografía Manga Michi (El camino del manga, 1970) o la biografía La vida de Mao Tse-Tung (Mô Tokutô Den, 1973).

En 1987, ambos autores decidieron disolver el dúo creativo para continuar con sus respectivas carreras por separado, dividiéndose entre ellos de forma equitativa los derechos de autoría de las obras que habían creado conjuntamente y adoptando desde entonces los seudóminos de Fujiko F. Fujio (Fujimoto) y Fujiko Fujio A (Abiko), pues ninguno de los dos quiso renunciar al nombre que les había consagrado.

Su obra más exitosa en todo el mundo, Doraemon, fue a parar a manos de Fujiko F. Fujio, que continuaría con su publicación hasta su mismo fallecimiento en 1996.

¿De qué trata?

La película nos cuenta la historia de Nobita y Doraemon, de sobra conocida por el público. 

Doraemon, un robot con forma de gato que puede sacar aparatos maravillosos a placer de su bolsillo mágico, llega del futuro para ayudar a Nobita, un niño vago, torpe, desgraciado e infeliz, para que en el futuro sus actos no afecten a su familia.

Doraemon intentará por todos los medios que Nobita se case con Shizuka, su amiga de la infancia, pues de esa forma su futuro cambiará totalmente para mejor.

Nuestra Opinión

Stand By Me nos cuenta de manera muy acertadamente cohesionada diversas historias del manga original, juntando en un solo relato los capítulos iniciales en los que Doraemon llega desde el futuro y entabla una profunda amistad con Nobita, el episodio especial sobre el futuro de Nobita y Shizuka y el que fue siempre uno de los episodios más emotivos de la obra y que da título a la película: el regreso al futuro de Doraemon. Los directores logran así conformar un largometraje que funciona perfectamente por sí solo.

Y es que esta película, además de ser una pequeña joya que robará el corazón a los más nostálgicos, es una de las mejores películas infantiles de animación de los últimos años. Incluso un niño (o, por qué no, un adulto) que no conozca a Doraemon podrá disfrutar de este bello filme.

Visualmente puede chocar un poco al principio, pues todos estamos acostumbrados a los diseños originales en 2D, pero en cuanto nos hagamos al 3D podremos apreciar una calidad de animación espectacular, unos diseños con gran personalidad y expresividad, y unos escenarios realistas pero acordes con la estética de la película.

No olvidemos tampoco que Doraemon se nos presenta más adorable y entrañable que nunca con este nuevo aspecto.

Se puede apreciar en cada minuto del filme cómo sus directores se han volcado personal y emocionalmente en la producción, con un objetivo mucho más allá del meramente comercial, para ofrecer un sentido y sincero homenaje al maestro Fujiko F. Fujio y a su creación, que pasa por ser el más importante manganime kodomo de todos los tiempos y con el que han crecido y siguen creciendo decenas de generaciones de niños de todo el mundo.

Una película emotiva y divertida, con la que es imposible no sentir al menos un escalofrío en la espalda y derramar alguna que otra lagrimilla de tristeza y nostalgiaPerfecta para toda la familia.


Nota Final: 10 [ - Imprescindible - ]

lunes, 7 de marzo de 2016

[Grandes Autores] Satoshi Kon, genio efímero



¡Saludos a todos nuestros lectores y bienvenidos un día más a La Bandera de la Libertad!

Como podéis ver, no traemos hoy una de nuestras acostumbradas reseñas, sino que estrenamos una nueva sección a la que llevábamos ya unos cuantos meses dándole vueltas y a la que hemos titulado "Grandes Autores". 

En esta sección dedicaremos una entrada específicamente a hablar de algunos de los más grandes autores que ha dado el mundo del manganime y que se encuentran entre nuestros predilectos, fundamentalmente mangakas y/o directores de animación, aunque no se descartan escritores y guionistas para un futuro. 

Para inaugurar la sección hemos elegido a uno de nuestros más admirados directores de animación japoneses (y no japoneses), el grandísimo e inigualable genio Satoshi Kon. Si hemos seleccionado a Kon para abrir esta serie de artículos y no a otro como Leiji Matsumoto (lo que quizá habría sido más consecuente teniendo en cuenta la temática del blog) es porque no solo se trata de uno de los autores que más admiramos y respetamos, sino porque además su tristemente escasa obra (a causa de su prematura muerte, de ahí que le tildemos de "genio efímero") nos permite abordar con más comodidad los diversos apartados del post ahora que aún no lo tenemos totalmente construido, ya que es la primera vez.

En este artículo y en todos los que le sigan en la sección de Grandes Autores presentaremos una biografía del personaje en cuestión junto con un repaso a sus obras más destacables (realizadas personalmente por él y/o adaptaciones a otros medios si se tercia). 

Satoshi Kon, genio efímero

Nacido en Hokkaido el 12 de octubre de 1963, Satoshi Kon es considerado a día de hoy uno de los más talentosos directores de animación que ha dado no solo la industria japonesa, sino la historia del cine en general. Su prematuro fallecimiento el 24 de agosto de 2010 truncó la que podría haber sido una prolífica carrera, pero Kon no se marchó sin dejarnos antes grandes muestras de su genialidad a través de sus 4 largometrajes, su serie de televisión de 13 episodios y sus trabajos como mangaka.

Tras graduarse en el curso de Diseño Gráfico de la Universidad de Musashino en 1982, Kon debutó profesionalmente en el mundo del manga con la historia corta Toriko en 1984, tras lo cual comenzaría a trabajar como asistente de uno de sus más admirados autores, el mismísimo Katsuhiro Otomo (Akira), quien supondría una decisiva influencia en el desarrollo del estilo gráfico del propio Kon, influencia especialmente notable en sus primeras obras. 

En 1990 publicó su primer trabajo notable como mangaka, Regreso al Mar (Kaikisen), una historia de un solo tomo en la que comenzaba ya a apreciarse el estilo propio de Satoshi Kon, en el que entremezclaba realidad y ficción de forma natural y sutil. 

Ese mismo año trabajaría nuevamente con su mentor escribiendo el guión de la película de imagen real World Apartment Horror, dirigida por Otomo. Además, en 1991 se publicaría la adaptación al manga de la película, dibujada por el propio Kon.

En los años siguientes, el joven Satoshi Kon trabajaría en diversos puestos de varios proyectos de animación, como Roujin Z (Hiroyuki Kitakubo, 1991), Mobile Police Patlabor 2 (Mamoru Oshii, 1993) o Memories (Katsuhiro Otomo, 1995). 

En 1994 publicaría, con Mamoru Oshii al guión, el manga Seraphim: 266613336 Wings, que quedaría inconcluso tras lanzar un solo tomo al mercado. 

Tras ello, entre 1995 y 1996 vería la luz Opus, obra que finalizaría con dos tomos al ser cerrada la revista en que se publicaba, pero en la que ya se puede ver a Satoshi Kon en todo su esplendor, siendo un claro precursor del estilo que veríamos más adelante en sus obras animadas.

No sería hasta 1998 cuando Kon se lanzó de lleno al mundo de la animación con su ópera prima, Perfect Blue, convertida instantáneamente en un clásico moderno y considerada a día de hoy uno de los mejores thrillers, no solo del cine de animación, sino del cine en general.

Continuaría cosechando éxitos en 2001 con Millenium Actress, a la que seguirían Tokyo Godfathers en 2003 y Paprika en 2006, su último filme finalizado. En 2004 dirigió su única serie de televisión, Paranoia Agent, en la que vertió todos los retazos de ideas a partir de los cuales no se podía desarrollar un largometraje.

En sus cuatro películas y su serie de televisión, Satoshi Kon hizo gala de un estilo muy particular que le valió la consideración de genio a nivel internacional, en el que entremezcla de manera magistral la realidad con la ficción, lo real con lo onírico, una fusión que llegaría a sus cotas máximas con su último largometraje, Paprika

En 2010 le sería diagnosticado un cáncer terminal. Le quedaban, a lo sumo, 6 meses más de vida. Ante la demoledora noticia, Satoshi Kon se retiró de la escena pública, asumiendo su destino y dejando inacabada su última película, The Dreaming Machine, aún a la espera de ser finalizada más de 5 años después de su fallecimiento por el estudio MADHOUSE

El 24 de agosto de 2010 nos dejó una de las más brillantes mentes que ha dado la historia de la animación, pero dejó con nosotros un importante legado que, si bien no es muy abundante en cantidad, sí lo es en calidad.

Sayonara

Poco antes de fallecer, Satoshi Kon dejó escrita una carta para sus fans en la que, con las degarradoras palabras de alguien que afronta la muerte inminente, se despedía, pedía disculpas y agradecía la vida plena de la que había podido gozar. Sería su viuda quien se encargaría de publicar la entrada en el blog del difunto de forma póstuma.

Os dejamos a continuación algunos extractos de esta carta, a la que tituló "Sayonara", "Adiós". Los interesados podéis encontrarla completa con facilidad en Internet. Advertimos que se trata de unas palabras bastante duras y conmovedoras.

"Era como si la muerte en persona se hubiera puesto justo detrás de mí antes de darme cuenta, y no había nada que pudiera hacer. (...) Rechacé los medicamentos contra el cáncer y traté de vivir con una perspectiva del mundo un poco diferente a la norma. El hecho de rechazar lo que supuestamente es normal me parecía que era algo muy mío."
"Tal vez morir no sea tan malo."
"[Tras superar una neumonía] Ahora que mi fuerza vital se había restablecido, no podía desperdiciar mi tiempo. Me dije que me habían dado una vida extra y que tenía que emplearla con cuidado." 
"Había tanta gente a quien quería ver antes de morir, aunque solo fuera para darles las gracias. (...) Hay mucha gente que quiero que ver al menos una vez (...), pero si los viera, tengo miedo de que el pensamiento de no volver a verlos me invada y que eso provoque que no tenga una muerte tranquila. (...) Quería que la mayoría de la gente que conocí me recordara como el Satoshi lleno de vida."
"Así que, a todos los que leyeron este largo escrito, gracias. Con el corazón lleno de gratitud por todo lo bueno del mundo, soltaré mi bolígrafo. 
Ahora, con permiso, tengo que adelantarme."

Obra de Satoshi Kon: Manga

Regreso al Mar (1990)


<< Yosuke, un adolescente a punto de entrar en la universidad, se propone cumplir con un viejo, matutino y rutinario ritual que toda su familia y sus ancestros llevan realizando durante generaciones. Su familia fue depositaria hace muchos años de un huevo de sirena y durante un período de sesenta años su cuidador, un miembro de la familia de Yosuke, debería cambiar el agua cada siete días y al finalizar ese período de tiempo mencionado lo devolvería al mar, a la sirena que les otorgó su cuidado. A cambio, el pequeño pueblo de Amite, gozaría de un mar en calma y buena pesca. >>
Con esta primera obra "larga", Satoshi Kon empezaba a hacer gala de su habilidad para fusionar la realidad y la ficción, presentándonos un relato de corte costumbrista en el que nos presenta el eterno debate entre la modernidad y la tradición a través de un tradicional pueblo pesquero que se ve en en la encrucijada entre prosperar o mantener sus costumbres, todo ello teñido de una pátina de ficción y mitología.

Una gran obra que, si bien no iguala a las grandes obras maestras del autor, es un grandísimo inicio para una leyenda como Kon

World Apartment Horror (1991)


<< Un yakuza recibe el encargo de echar a unos inmigrantes de unos apartamentos que pronto serán demolidos. Lo que en un principio parece una tarea sencilla, se complicará de una forma inimaginable... >>
Otro de los primeros trabajos de Kon en el mundo del manga. Como comentábamos en la biografía, se trata de la adaptación al manga de la película de imagen real homónima dirigida por Katsuhiro Otomo y guionizada por el propio Kon. Si bien carece de la calidad de sus futuras obras, ya se puede entrever algo de talento en el estilo. Su dibujo, que aún no había alcanzado su personalidad posterior, se asimila más al de su mentor. Una historia que mezcla comedia, acción y temática sobrenatural. Entretiene sin ser una maravilla.

Seraphim: 266613336 Wings (1994)


<< En un futuro postapocalíptico en el que la humanidad ha sido azotada por un terrible virus que petrifica el cuerpo y crea unas protuberancias similares a alas en la espalda del enfermo, haciéndolo así parecido a un ángel de piedra, tres científicos deberán proteger a una misteriosa niña, que parece inmune a la enfermedad y es la única esperanza para encontrar una cura. >>
Si bien este manga tiene mucho mas de su guionista, Mamoru Oshii, que del propio Kon, su dibujo pertenece totalmente al autor que nos ocupa. Un estilo que bebe mucho de la obra de Otomo, pero que ya ha desarrollado un toque personal respecto a sus anteriores obras que además dota a la obra de un gran realismo.

Desgraciadamente, debido a ciertas discrepancias entre ambos genios, la obra quedó inconclusa con un solo tomo muy introductorio terminado, que aun así vale mucho la pena leer. 

Para más información respecto a esta obra, podéis pasaros por la reseña que le dedicamos hace un tiempo, aquí enlazada.

Opus (1995-1996)



<< La historia de un mangaka (claramente basado en Kon) que es de pronto absorbido por su propia obra, viéndose obligado a sobrevivir en el mundo que él mismo ha creado. >>
Esta última obra de Satoshi Kon en el mundo del manga fue, sin duda, la mejor de todas. Preñada del estilo propio del autor ya totalmente desarrollado, Opus nos presenta una extraña y magistral mezcla de elementos reales y oníricos que van aumentando en intensidad con el paso de los capítulos y hasta su mismísimo final, que si bien no fue como inicialmente se planeó (pues la revista en que se publicaba cerró y tan solo contamos con los storyboards de los dos últimos capítulos), no pierde ni un ápice de la esencia del maestro. De hecho, podríamos decir que incluso se beneficia de aquel contratiempo: cuesta imaginar un desenlace más puramente Kon.


Obra de Satoshi Kon: Anime

Perfect Blue (1998)


<< Perfect Blue nos cuenta la historia de Mima, una idol que tras dejar Cham, el grupo que la llevó al éxito, se introduce como actriz en el mundo del cine. Esto hará que empiece a recibir misteriosas cartas y amenazas de un misterioso acosador que parece conocer cada uno de sus pasos. 
Mima empezará a sufrir paranoias que harán que pierda el sentido de la realidad, hasta finalmente ser acorralada por su acosador. >>
Ópera prima del director y, para muchos, su mejor película. Perfect Blue engulle totalmente al espectador, haciéndole perder la capacidad de distinguir lo real de lo falso en el filme, logrando así la máxima identificación con su protagonista.

Una película mítica considerada una de las más grandes obras no solo del anime, sino del cine en general. Y no por nada, ya que estamos ante un thriller inigualable, hasta el punto de que resulta prácticamente imposible tal grado de maestría en el debut en la dirección de un cineasta... pero así fue. El genio de Satoshi Kon no conocía límites.

Para más información, pasaos por nuestra reseña.

Millennium Actress (2001)



<< Un director de cine decide filmar una película biográfica sobre Chiyoko Fujiwara, una reconocida actriz japonesa que se retiró décadas atrás. 
Al llegar a su casa, se encuentra con una anciana Chiyoko que le empezará a contar la historia de su vida, entremezclando sus recuerdos reales con los de los personajes que interpretó a lo largo de su prolífica carrera. >>
En esta segunda película, Kon decidió contarnos la vida y obra de una consagrada actriz de cine, ya retirada y anciana, que concede una última entrevista. El director nos permitirá conocer la trayectoria vital y profesional de la mujer, en cuya dañada memoria se entremezclan los recuerdos de su vida real y los de las películas que protagonizó.

Es sabido, aunque no tanto como debería, que Satoshi Kon basó a la protagonista de este filme en una de las más míticas actrices del cine clásico japonés: la gran Setsuko Hara, musa de Yasujiro Ozu y protagonista de varias de sus obras maestras (entre ellas, Cuentos de Tokio), y de quien nunca más se supo nada tras su retiro en los años 60. De esta forma, Millennium Actress no es solo otra de las muestras del talento del director, sino toda una oda al cine en su más pura esencia.

Tokyo Godfathers (2003)



<< Tres vagabundos, un deportista caído en desgracia, una adolescente fugada de casa y una mujer trans, encuentran en Nochebuena un bebé tirado en la basura con unos papeles que la relacionan con su madre, quien aparentemente la abandonó.  
Juntos emprenderán una aventura por las calles de Tokio para devolver la niña a su madre, viéndose envueltos en tramas de mafias, peleas callejeras, y persecuciones que les conducirán a reencontrarse y reconciliarse con sus pasados y con ellos mismos. >>
Su tercer largometraje fue también una película algo diferente en la filmografía de Kon, pero igualmente espectacular. Emotiva y divertida a partes iguales. Esta película puede hacerte llorar, reír o saltar del asiento en cualquier momento, cosa que pocos directores pueden lograr.

Este atípico cuento navideño, aunque alejado de la psicología habitual de su cine, representa para nosotros una de sus mejores creaciones, sin duda nuestra película favorita del director, y además cuenta con el personaje más entrañable al que dio lugar: la maravillosa Hana.


Paranoia Agent (2004)



<< Tokio se ve amenazada por un pequeño delincuente armado con un bate de béisbol que atacará a ciertas personas, formando una historia que se irá hilando poco a poco. >>
Sin ser tan grande como sus películas, esta única serie de televisión de Satoshi Kon es un cajón de sastre donde vertió todas las ideas que no cabían en sus anteriores obras o no daban de sí para crear una historia larga, creando así una paranoia (como ya dice el título) que se va formando y degenera hasta explotar completamente en su gran final, claro precursor de la escena clímax de su siguiente película, Paprika.

Quizá una serie algo hostil por su alto contenido psicológico y su extraña estructura, pero llena de pequeñas trazas de genialidad.

Paprika (2006)



<< Konakawa Toshimi, un detective de la policía japonesa, acude a Paprika, una misteriosa psiquiatra con una máquina que le permite introducirse en sus sueños para encontrar aquello que atormente a su paciente. 
Sin embargo, estas máquinas son robadas, provocando un caos que Paprika, con ayuda de Toshimi, deberá detener antes de que sea demasiado tarde. >>
La película más psicodélica de Kon, que es a la par un gran thriller psicológico (aunque tal vez algo más suave que en sus obras anteriores) y un gran espectáculo visual de colorido y psicodelia que aumenta con el progreso del filme, hasta llegar a su intenso final, donde todo se sale fuera de control.

Como ya hemos comentado, estamos aquí ante la última obra finalizada de un grandísimo genio que nos dejó demasiado pronto.






Y hasta aquí ha llegado nuestro primer artículo de la sección Grandes Autores, que además es un sentido homenaje por nuestra parte al inconmensurable genio de Satoshi Kon, fallecido hace algo más de 5 años. 

Esperamos que os haya gustado esta nueva sección del blog, de la que más adelante os traeremos nuevas entregas hablando de más y más autores.

Un saludo a todos y hasta la próxima.