¡Un saludo y bienvenidos a La Bandera de la Libertad!
Un año más se acaba, y a poco más de 24 horas de que llegue el 2018, como ya es tradición, nosotros hemos querido despedir el año echando un poco la vista atrás para hacer una pequeña retrospectiva de nuestras lecturas de manga. Al igual que ya hicimos en 2015 y 2016, queremos seguir con esta costumbre y cerrar nuestro 2017 bloguero con un top de lecturas.
Al igual que las veces anteriores, intentamos ofrecer un top lo más variado posible, poniéndonos la norma de no poner más de una obra de cada autor en el top de cada uno de nosotros. Aunque, inevitablemente, algunos autores están presentes en nuestros dos tops, e incluso algunos de los puestos son comunes para los dos.
Sin más dilación, empezamos ya con el top, no sin antes invitaros a todos los que nos leáis no solo a que comentéis los nuestros, sino a que os suméis a hacer esta valoración personal de vuestro año como lectores de manga.
Menciones Especiales
Pero antes de comenzar con los puestos propiamente dichos, queremos hacer un pequeño inciso para mencionar un par de obras que no hemos querido introducir directamente en el top por los motivos que detallaremos aquí, pero que queremos mencionar.
* ADRI: La Princesa Caballero, de Osamu Tezuka, ha sido una lectura de ultimísima hora (fue un regalo de Navidad, de hecho), por lo que no ha llegado a entrar en este top que ya teníamos formado desde antes. El primer shojo manga argumental de la historia y una de las más icónicas obras de la primera etapa de Tezuka, con un estilo muy disneyniano. Por todo ello es una obra de gran valor histórico y una lectura ligera y agradable. Por otro lado, quiero mencionar también Zankoku na Kami ga Shihai Suru, de Moto Hagio, una obra que aun no he acabado pero ya apunta a convertirse en una de mis favoritas. Solo puedo describirla con una palabra: cruel. Es la obra más cruel que he leído, es realista, es dura... un retrato perfecto de la lacra que son los abusos sexuales. Moto Hagio siempre hace buenas obras, pero con esta se corona totalmente. Sublime.
10º Puesto
* ADRI: Koi Kaze, de Motoi Yoshida. Es bien sabido que el incesto en el manga es un tema bastante fetichizado en las obras más mainstream, lo cual hace que sea bastante complicado encontrar una obra que no lo muestre como pura herramienta de fanservice. Bueno, pues esta es la obra que lo muestra como lo debe mostrar: de forma realista, profundizando en la relación, sin caer en el típico "mi hermanita pequeña no puede ser tan mona" y con la crudeza (y belleza) que entraña una relación de este tipo. Serio, realista y hermoso. También cabe destacar el arte del autor, con un estilo muy particular bastante próximo al carboncillo y poco uso del perfilado con tinta, lo cual aporta mucha belleza estética a las escenas. Muy recomendable.
9º Puesto
* ADRI: orange, de Ichigo Takano. Continúo el top con uno de los pocos shojo (aunque se terminara de publicar en una revista seinen) románticos de tipo más genérico que han conseguido tocarme la patata. Lejos de centrarse en el romance, esta obra se centra en la amistad, en la labor que puede desempeñar un grupo de amigos para proteger y hacer feliz a alguien que les importa. No será una obra maestra, pero es muy bonito y resulta fácil sentirse identificado con los personajes, pues aunque no hayamos estado cerca del suicidio, todos hemos tenido algún momento de flaqueza en el que nuestros amigos han estado ahí. Lástima que la irregularidad técnica y el mal ritmo de la adaptación animada hayan difamado la obra para quienes no han leído el manga. Podéis leer nuestra reseña de la película de imagen real aquí.
8º Puesto
* ADRI: Opus, de Satoshi Kon. Aunque Satoshi Kon (Perfect Blue, Tokyo Godfathers) siempre destacó y es recordado por su labor como director de cine de animación, antes de dar el salto al anime realizó varios trabajos notables como mangaka (como Seraphim), especialmente Opus, probablemente su obra magna en el campo del cómic, una obra que muestra cómo un manga y su propio autor entran en contacto, con sus personajes poniéndole en peligro y en situaciones de lo más peliagudas. Debido al cierre de la revista, Kon se vio obligado a cerrar la historia de forma abrupta, pero el final que le dio sigue siendo sublime, de lo mas original, y una muestra del ingenio y talento de Kon. A pesar de que dicho final nunca fue publicado hasta la recopilación en tomo, y tan solo en forma de borradores. Podéis leer el post que le dedicamos a este inigualable genio aquí.
7º Puesto
* ADRI: Hokuto no Ken, de Buronson y Tetsuo Hara. "Mad Max meets Bruce Lee". Todo un icono del manga de acción ochentero, una de esas grandes obras de referencia de la historia del manga. Sangriento, brutal y con grandes (muy grandes) dosis de testosterona. Tal vez los arcos segundo y tercero no sean tan buenos ni tan míticos como el legendario primer gran arco (es decir, el de Raoh), pero solo por la acción, el desbordante carisma de Kenshiro y la cantidad de sangre y tripas que nos brinda el genial dibujo de Tetsuo Hara, esta obra vale la pena y se corona como una de mis mejores lecturas del año. ¡Omae wa mou shindeiru!
6º Puesto
* ADRI: El Caminante, de Jiro Taniguchi. Esta obra es una de las mejores pruebas posibles de que un manga puede ser una obra maestra sin necesidad de tener
ningún tipo de hilo argumental. Simplemente una serie de agradables paseos que da el protagonista por su nuevo barrio, en los que priman la atmósfera y
el dibujo por encima del texto. Es una de esas obras que se disfrutan dejándose
llevar y gozando de la vida cotidiana del Japón actual. No necesita absolutamente nada más. De lo mejorcito del gran maestro Jiro Taniguchi, de quien hemos reseñado anteriormente sus obras maestras El Almanaque de mi Padre y Barrio Lejano.
* ALEJANDRO: Wet Moon, de Atsushi Kaneko. Una de las más gratas sorpresas de este año ha sido para mí este fantástico thriller de Atsushi Kaneko. Desde que se anunció su publicación me llamó poderosamente la atención, pero en ningún caso llegué a pensar que pudiera resultar tan fascinantemente atrapante como finalmente fue. Su críptica historia de estilo noir con toques de delirio y surrealismo y su estética pop-art (con sombras negras fuertemente delineadas y sin grises, incluso utilizando ocasionalmente una tercera tinta de color rojo o dorado para algún elemento de las viñetas) convierten este manga en una lectura que no puedes dejar hasta el final. Grandes expectativas por leer más obras del autor.
5º Puesto
* ADRI y ALEJANDRO: La Respiración de Copérnico, de Asumiko Nakamura. Y al igual que sucedió los pasados años, volvemos a "economizar" algunos puestos con obras en común para los dos. En este caso, un año más se suma a nuestro top de mejores lecturas una obra de la genial Asumiko Nakamura, a la que consideramos una de las autoras más talentosas de la actualidad, como ya hemos dejado patente más de una vez, como podéis ver en nuestra reseña de Utsubora.
En esta ocasión tenemos entre manos La Respiración de Copérnico, publicado por Milky Way como inicio de la Colección Asumiko Nakamura que en breve continuará con Chicken Club y All About J. Un BL de temática circense y ambientación de los años 70 en Europa, escenario perfecto para las acostumbradamente sórdidas y dramáticas historias de Nakamura. Es fascinante cómo en esta obra, que fue su primera serie profesional, Nakamura ya había desplegado al máximo su inigualable capacidad artística, dejando para el recuerdo algunas de sus mejores páginas hasta la fecha.
4º Puesto
* ADRI: Marginal, de Moto Hagio. A pesar de no poder incluir aún Zankoku na Kami ga Shihai Suru, Moto Hagio tenía que entrar en mi top sí o sí. Y lo hace con una obra compleja, que usa el romance homosexual de forma muy inteligente, yendo mucho más allá de lo que se consideraría un "simple BL". Con una gran narrativa y, sobre todo, una historia compleja y profunda llena de giros argumentales que requieren esfuerzo del lector para comprender en su totalidad. Una fantástica obra de ciencia ficción que, aunque no llegue a la altura de otras grandes obras de la autora, no es nada desdeñable. Y de hecho, podéis leer nuestra reseña aquí.
* ALEJANDRO: Oniisama e..., de Riyoko Ikeda. Para mantener la temática de este puesto del top, yo coloco aquí Oniisama e..., una de las principales obras de la también autora del Grupo del 24 Riyoko Ikeda. Sin llegar al nivel de La Rosa de Versalles, Oniisama e... es una obra corta y fascinante, en la que Ikeda desliza con gran elegancia una crítica al clasismo social, especialmente a las élites. Y como si eso fuera poco, presenta un drama romántico que constituye uno de los primeros shojo-ai de la historia del manga. Clásico imprescindible. Aunque también quiero señalar que, por tercera vez, he tenido que elegir entre dos obras leídas de la autora. Si finalmente me decanto por esta es por su mayor grado de perfección, pero no quiero olvidar Claudine, una de las mejores pruebas de lo adelantadas a su tiempo que fueron estas autoras, pues presentaba un drama realista protagonizado por un joven transexual en una sociedad que no le comprende.
3er Puesto
3er Puesto
* ADRI y ALEJANDRO: Ashita no Joe, de Asao Takamori (Ikki Kajiwara) y Tetsuya Chiba. Un nuevo puesto compartido para esta medalla de bronce, aunque se trata de una obra que en casi cualquier otro año podría estar perfectamente en el número 1. Y es que este año hemos leído unas cuantas obras maestras que se han convertido en algunas de nuestras favoritas, y esta es una de ellas. Pero de algún modo había que ordenarlas.
Ashita no Joe no es solo un spokon. Incluso se puede decir que no es solo un manga. Es el relato de toda la vida profesional de un boxeador ficticio, contada
con crudo realismo y detalle. Es un drama deportivo que cuenta además con algunos de
los mejores combates jamás dibujados, y es un icono de la cultura popular japonesa por encima de todo. La
historia de Joe Yabuki trasciende su género y sienta unas bases que definen el
género y que marcaron para siempre la historia del manga.
2º Puesto
* ADRI y ALEJANDRO: Dôsei Jidai, de Kazuo Kamimura. Tercer y último puesto compartido de nuestro top de 2017 es esta medalla de plata, de nuevo concedida a una obra que perfectamente podría estar también en el primer lugar de la lista. Dôsei Jidai (La Época en que Vivíamos Juntos), la obra maestra del manga costumbrista de Kazuo Kamimura, cuya Historia de una Geisha reseñamos hace un tiempo.
1er Puesto
* ALEJANDRO: Poe no Ichizoku, de Moto Hagio. Y por mi parte, cierro el top de este año 2017 con la tercera de esas lecturas que se se han posicionado entre mis obras favorita hasta la fecha. Una de las mayores obras de la maestra Moto Hagio, Poe no Ichizoku (El Clan Poe). Un drama muy decimonónico sobre vampirismo, con lo que una vez se demuestra el adelanto a su tiempo de las autoras del 24: años antes de que Anne Rice popularizara con sus obras literarias la nueva visión romantizada del mito del vampiro en Occidente, la maestra Hagio ya había hecho lo propio con esta apasionante obra, que es toda una referencia de la historia del manga a día de hoy. Imprescindible.
Y hasta aquí ha llegado nuestro top de lecturas de este año. Esperamos que os haya gustado, que os haya descubierto alguna que otra obra nueva para leer este nuevo año y, por supuesto, que compartáis con nosotros las que hayan sido vuestras lecturas favoritas del 2017.
¡Hasta la próxima y feliz fin de año!
El mejor drama romántico que hemos tenido el placer de leer. Una joya
del costumbrismo japonés de un maestro que hizo lo mismo por el género en el manga que el mismísimo Yasujiro Ozu en el cine: elevarlo a su máxima expresión artística. Dôsei Jidai es pura
poesía visual y es una muestra del gran talento artístico que poseía Kazuo Kamimura (no por nada se le llamó "el pintor de Ukiyo-e de la Era Showa"). Un
autor sensible, un poeta encarnado en mangaka que en esta, su obra maestra, se
corona como uno de los más grandes artistas de su tiempo y del nuestro. Una obra que retrata el amor en sus más crudas y diversas facetas, como el mismo Kamimura recita en la constante letanía: "El amor se presenta siempre como un conjunto de errores. Si es hermoso a pesar de todo, es, ciertamente, porque los errores cometidos por el hombre y la mujer son hermosos. Y si el amor termina siempre entre lágrimas, es, ciertamente, porque el amor mismo es un depósito de lágrimas..."
1er Puesto
* ADRI: La Rosa de Versalles, de Riyoko Ikeda. Y finalmente, llegamos al primer puesto, medalla de oro para la obra maestra de Riyoko Ikeda. Un
shojo de temática histórica, documentado con un gran rigor (como acostumbra a hacer Ikeda cuando obras históricas), una narrativa y un dibujo
impresionantes, y una prueba del gran talento y reivindicación, no solo de la
autora, sino de todo el Grupo del 24. Una obra que no solo es un icono inigualable en la historia del manga hasta el día de hoy (con miles de turistas japoneses visitando el Palacio de Versalles esperando encontrarse en cualquier esquina con Oscar o María Antonieta) y un
gran drama, sino que además es una forma perfecta de conocer y entender la
sociedad y acontecimientos de los años previos al estallido de la Revolución Francesa. Sin
duda, una de las grandes obras del manga.
Y hasta aquí ha llegado nuestro top de lecturas de este año. Esperamos que os haya gustado, que os haya descubierto alguna que otra obra nueva para leer este nuevo año y, por supuesto, que compartáis con nosotros las que hayan sido vuestras lecturas favoritas del 2017.
¡Hasta la próxima y feliz fin de año!