Hola a todos y bienvenidos a nuestra nueva reseña. Hoy hablaremos de una película del famoso Estudio Ghibli, dirigida por el gran Isao Takahata, Recuerdos del Ayer (Omoide Poroporo, también conocida por su título en inglés, Only Yesterday).
Estrenada en 1991, Recuerdos del Ayer está basada en el manga del mismo título de Hotaru Okamoto (guión) y Yuuko Tone (dibujo), publicado entre 1987 y 1991. La película, dirigida como hemos comentado por Isao Takahata, co-fundador de Ghibli, constituye una excepción en la tónica habitual de la filmografía del estudio, pues es la única de sus películas dirigida específicamente a un público adulto (mayormente femenino), y una de las pocas que no contienen elementos fantásticos más allá de un perfectamente implementado realismo mágico en la última escena.
Isao Takahata, el genio eclipsado
El director de la película que reseñamos en esta ocasión no es otro que Isao Takahata, quien pasa por ser uno de los mejores directores de la historia del cine de animación, no solo japonés, sino mundial. Co-fundador del prestigioso Estudio Ghibli, Takahata ha quedado frecuentemente eclipsado por la muy alargada sombra de su colega y amigo Hayao Miyazaki, cuya popularidad, especialmente en Occidente, es infinitamente mayor. No significa esto, no obstante, que Isao Takahata sea peor director, sino más bien al contrario, ya que es tan grande o incluso más que Miyazaki.
Nacido en 1937, Takahata se incorporó a las filas de Toei y debutó profesionalmente como director con Las Aventuras de Hols: Príncipe del Sol (Taiyou no Ouji Horusu no Daibouken) en 1968, en la que ya trabajó codo con codo con Hayao Miyzaki, encargado de la animación.
Entre 1974 y 1978, trabajó para Nippon Animation dirigiendo tres de las más importantes series del contenedor World Masterpiece Theater (Sekai Meisaku Gekijo), que buscaba ofrecer adaptaciones a la animación de grandes clásicos de la literatura infantil, generalmente europea. Nos referimos a los clásicos Heidi (Alps no Shoujo Heidi), Marco (Haha wo Tazunete Sanzenri) y Ana de las Tejas Verdes (Akage no Anne), en los que Miyazaki participó nuevamente en la animación.
En 1985, Isao Takahata y Hayao Miyazaki se independizaron de todos los estudios y fundaron juntos el Estudio Ghibli, que acabaría convirtiéndose en uno de los más prestigiosos del mundo y que ha ofrecido grandes obras maestras de la animación. En Ghibli, Takahata ha dirigido hasta la fecha cinco películas, consideradas todas ellas auténticas obras de arte. En 1988 llegaría a las carteleras japonesas el drama antibelicista La Tumba de las Luciérnagas (Hotaru no Haka), la mayor obra maestra del director y una de las más importantes películas animadas de la historia. A ella le seguirían el drama costumbrista Recuerdos del Ayer (Omoide Poroporo, 1991), la fantasía ecologista Pompoko (Heisei Tanuki Gassen Ponpoko, 1994), la comedia familiar costumbrista Mis Vecinos los Yamada (Tonari no Yamada-kun, 1999) y, finalmente, El Cuento de la Princesa Kaguya (Kaguya-hime no Monogatari, 2013), adaptación del clásico de la literatura nipona El cortador de bambú (Taketori Monogatari).
Además de las películas dirigidas por él mismo, Takahata ha trabajado en diversos niveles de muchas de las producciones del estudio, especialmente en las de Miyazaki, desde la producción hasta la animación.
Otras de las películas dirigidas por Isao Takahata antes de la fundación de Ghibli son Goshu el Violoncelista (Cello Hiki no Gauche, 1982), adaptación del cuento homónimo de Kenji Miyazawa o Las Aventuras de Panda y sus Amigos (Panda Kopanda, 1972-1973).
¿De qué trata?
La película nos cuenta la historia de Taeko Okajima, una mujer de Tokio que durante sus vacaciones de verano decide ir a Yamagata, el pueblo donde viven su hermana y su cuñado, para ayudarles en los trabajos del campo.
Su estancia en el pueblo hará que empiece a recordar su pasado, su infancia, mientras trabaja en los huertos.
Los recuerdos de su pasado y la hospitalidad de sus familiares y amigos, junto al relajante ambiente del campo harán que empiece a reconsiderar el rumbo de su vida.
Nuestra Opinión
Recuerdos del Ayer es un relato costumbrista muy relajante y agradable, el cual nos cuenta con un toque de nostalgia la infancia de su protagonista, de una forma entrañable y en ocasiones divertida, pero también algo triste en ciertos momentos.
Es interesante cómo muestra la vida de las familias japonesas en los años 60, siendo un punto a favor la fidelidad con la que lo refleja.
Visualmente es una maravilla, destacando las escenas campestres de Yamagata y los diseños de personajes típicos de estudio Ghibli pero con el toque amigable del cual Takahata suele dotarlos.
Una historia con un ritmo pausado y lento, al más puro estilo cinematográfico japonés, con un final brillante, un toque nostálgico que es sin duda una delicia y dirigida de forma magistral por el genio a menudo infravalorado que es Isao Takahata.
Una película muy agradable para disfrutar cuando no se desea ver nada complejo, perfecta para ver en familia. Sin duda una de las joyas mas interesantes de toda la filmografía de Ghibli.
Nota Final: 9 [ - Magistral - ]
Estoy muy de acuerdo con el comentario aquí de que Takahata es igual o mas grande que Miyazaki.
ResponderEliminarExcelente blog.