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miércoles, 13 de septiembre de 2017

[FINDE DE CINE] Boku Dake ga Inai Machi (Desaparecido) / Godzilla vs King Ghidorah



¡Un saludo y bienvenidos a La Bandera de la Libertad!

Volviendo ya del todo a la normalidad, regresa nuestra sección Finde de Cine una semana más, para hablar, como ya es costumbre, de las películas japonesas que hemos visto en el fin de semana. 

En esta ocasión, también siguiendo la costumbre, continuamos nuestro largo ciclo de kaiju-eiga con la entrega número 18 de la longeva saga de Godzilla, Godzilla vs King Ghidorah; y completamos el post hablando de la adaptación fílmica de uno de los animes más exitosos del pasado año, Boku Dake ga Inai Machi (Desaparecido en España).

¡Empecemos!


Boku Dake ga Inai Machi (Desaparecido)


Como adelantábamos, hoy comenzamos con la película Boku Dake ga Inai Machi, adaptación del manga homónimo (editado en España como Desaparecido) de Kei Sanbe, que también recibió una adaptación animada emitida el año pasado en Japón y que cosechó un gran éxito entre el público general. La película, estrenada también en 2016 en Japón, fue dirigida por Yuichiro Hirakawa (Until the Break of Dawn) y cuenta con el reclamo de Tatsuya Fujiwara (Death Note, Battle Royale, Makoto Shishio en Rurouni Kenshin, etc.) en el papel protagonista.

<< Satoru Fujinuma es un autor de manga fracasado que presenta un extraño don, puede prever las catástrofes que ocurrirán a su alrededor, lo cual deberá utilizar para resolver un crimen que ocurrió durante su infancia... >>

Para no andarnos con muchos rodeos, diremos desde ya que, habiendo leído el manga y visto el anime, esta película ha resultado ser la versión que más nos ha gustado y más hemos disfrutado de la obra

De por sí, Desaparecido está muy lejos de ser una obra maestra del thriller, y no es que esta película cambie eso. Aunque la premisa, personajes y la mayor parte del argumento y su desarrollo se mantienen prácticamente idénticos en las tres versiones, todas ellas difieren entre sí en el tramo final y la resolución del conflicto. Y es el de la película el que nos ha acabado satisfaciendo más de los tres: no resulta tan artificioso como el del manga, ni tan pseudo-filosóficamente ambiguo como el del anime.

Final al margen, el principal punto a favor que le vemos a la película es que permite condensar de forma muy eficiente la trama en dos horas de metraje, consiguiendo así un thriller mucho más compacto, directo y con mejor ritmo narrativo que sus otras versiones, en las que la tensión se diluye demasiado (lo cual es la tumba para un thriller).

Como decíamos, no estamos ni mucho menos ante ninguna joya, ya que la película sigue arrastrando inevitablemente ciertos defectos que hacen que pierda puntos, pero sí que logra resultar bastante más adictiva e interesante que el anime y, sobre todo, el manga (pues al menos el anime supo mantener la atención del espectador gracias a los fantásticos cliffhangers al final de cada episodio).

En lo que respecta a las interpretaciones, comentábamos que el principal reclamo de la película es Tatsuya Fujiwara, joven y popular actor ya bastante conocido gracias a sus papeles protagonistas en Death Note y Battle Royale. Y aunque Fujiwara hace también aquí un buen papel, creemos que lo más digno de destacar son las fantásticas interpretaciones que brindan los pequeños Tsubasa Nakagawa y Rio Suzuki, que a sus cortas edades (10 y 11 años respectivamente a fecha de la película) demuestran ya un gran talento interpretativo y resuelven con impecable eficacia sus papeles protagónicos. Hay que estar muy atentos al futuro como actores de estos niños.

En resumidas cuentas, estamos ante un thriller que, sin ser genial, cumple bastante bien y mantiene el interés durante las dos horas que dura. Y una vez más, una buena muestra de lo buenas que pueden ser las adaptaciones a imagen real


Godzilla vs King Ghidorah


Y vamos ahora con la entrega de Godzilla que toca esta semana, que no es ni más ni menos que la decimoctava película de la saga en general y la tercera de la Serie Heisei en particular. Estrenada en 1991 en Japón y dirigida nuevamente por  Kazuki Omori al igual que la anterior, este tercer filme de la segunda etapa del kaiju mantiene la línea de las anteriores: producciones más espaciadas en el tiempo para no agotar tan rápidamente al personaje unidas a unos valores de producción bastante elevados gracias a las técnicas de efectos especiales y disfraces, marionetas y maquetas, mucho más avanzadas que en las películas más clásicas de la franquicia. En esta ocasión, además, recuperan al mítico archienemigo de los kaijus de Toho: el destructor de civilizaciones King Ghidorah

<< Una extraña nave sobrevuela Tokio y aterriza en las afueras de la ciudad. Sus tripulantes son viajeros del tiempo que provienen del año 2204 y desean reunirse con las autoridades japonesas. En su futuro, Japón ya no existe porque ha sido totalmente arrasado por Godzilla, y estos “viajeros” quieren evitarlo impidiendo el nacimiento original del monstruo en 1944. >>

Es una alegría volver a disfrutar de un enfrentamiento entre los titanes que son Godzilla y King Ghidorah, que siempre fue el gran kaiju malvado de la saga. Y esta vez, además, con los fantásticos efectos especiales, trajes y marionetas que ya en 1991 eran capaces de crear y que nada tienen que envidiar a los efectos digitales que ya por aquel entonces se empezaban a generalizar en Hollywood.

Todo ello la convierte no solo en la entrega más impresionante visualmente hasta la fecha (puesto que va heredando normalmente cada nueva entrega por motivos obvios de progreso tecnológico y técnico), sino también en una de las más trepidantes e intensas.

Argumentalmente, la saga empieza a regresar a los tropos de los filmes de medidos y finales de la serie Showa, con argumentos de ciencia ficción bastante fantasiosos que en esencia solo conducen a grandes dosis de enfrentamiento entre bestias gigantes. Y al igual que sucedía con las dos anteriores, se nota un cierto toque algo más occidentalizado en el tono de la película, probablemente buscando ya la proyección internacional. Pero en comparación con VS Biollante, esta tiene un argumento más elaborado e interesante, lleno de viajes en el tiempo y una trama algo más compleja.

La acción es verdaderamente destacable, con una cruenta batalla entre Godzilla y King Ghidorah, que viene seguida por un segundo asalto con el apoteósico enfrentamiento entre el lagarto radiactivo y la versión mecanizada de su rival, Mecha King Ghidorah, una de las mejores batallas que hemos visto hasta ahora en la saga.





Y hasta aquí el Finde de Cine de esta semana. Esperamos que os haya interesado y que os animéis a ver las películas si no las habéis visto, y por supuesto a que compartáis vuestra opinión si sí lo habéis hecho.

¡Hasta la próxima!


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