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miércoles, 5 de agosto de 2015

[RESEÑA MANGA] Seraphim: 266613336 Wings



Hola a todos, bienvenidos a nuestra nueva reseña. Hoy es el turno de una obra conjunta de dos de los mejores autores (aunque en este caso ambos destacan mas como directores de animación) de la historia del manganime: Mamoru Oshii y Satoshi Kon. Se trata de Seraphim: 266613336 Wings.

Mamoru Oshii al guión

Mamoru Oshii, nacido en 1951, es a día de hoy uno de los directores de animación japoneses más importantes y conocidos en el mundo entero. Su estilo caracterizado por las historias de ciencia ficción con gran carga filosófica y simbólica, no tan alejados de la mentalidad occidental, le han convertido en todo un icono del anime.

En 1980 comenzaba su carrera profesional al ingresar en Studio Pierrot, donde haría sus primeros trabajos como director, destacando parte de la serie de televisión de Urusei Yatsura (manga de Rumiko Takahashi) y sus dos primeros filmes, Only YouBeautiful Dreamer. Más tarde, en 1983, Oshii sería elegido por el estudio para dirigir un importante proyecto, que sería el debut de toda una nueva forma de distribución de producciones animadas: el lanzamiento directamente en formato doméstico. Así, Dallos, de 4 episodios de media hora de duración, se convertiría en la primera OVA de la historia. Poco después dirigiría una nueva OVA, Tenshi no Tamago (El Huevo del Ángel), en la que ya manifiesta su característica carga simbólica y filosófica en una obra de arte animada de difícil comprensión, contando con los diseños de Yoshitaka Amano (ilustrador de Final Fantasy, Vampire Hunter D...).

A partir de entonces, Oshii comenzaría a dirigir las grandes obras que le valdrían la consideración de la que goza hoy, como la franquicia Mobile Police Patlabor, Sky Crawlers o, las más significativas, Ghost in the Shell y Ghost in the Shell 2: Innocence.

Satoshi Kon a los lápices

Al igual que Oshii, Satoshi Kon, nacido en 1963, logró consagrarse rápidamente como uno de los más talentosos directores de animación de la historia a pesar de corta carrera, truncada por su prematuro fallecimiento. 

Kon comenzaría su trayectoria profesional en el mundo del manga, como asistente de otro gran autor, Katsuhiro Otomo, cuya influencia sería claramente visible en el estilo gráfico de Kon. Entre sus primeros trabajos como mangaka encontramos World Apartment Horror, con guión del mismo Otomo, Regreso al Mar (Kaikisen) u Opus

En 1998, Satoshi Kon se lanzó al mundo de la animación con su ópera prima, Perfect Blue, convertida instantáneamente en un clásico moderno y considerada a día de hoy uno de los mejores thrillers, no solo del cine de animación, sino de la historia del cine.

Continuaría cosechando éxitos en 2001 con Millenium Actress, a la que seguirían Tokyo Godfathers en 2003 y Paprika en 2006, su último filme finalizado. En 2004 dirigió su única serie de televisión, Paranoia Agent, en la que vertió todos los retazos de ideas a partir de los cuales no se podía desarrollar un largometraje.

En 2010 le fue diagnosticado un cáncer terminal. Kon decidió retirarse y pasar sus últimos meses de vida con su familia, hasta su fallecimiento en agosto del mismo año, a la edad de 46 años. Dejaba así inacabada su nueva película, The Dreaming Machine (aún a la espera de ser retomada y finalizada por el estudio MADHOUSE), y quién sabe cuántas obras maestras aún sin salir de su genial mente.

A pesar de su prematura muerte, Satoshi Kon ofreció al mundo obras de inigualable calidad, un legado no muy abundante pero de grandísimo valor.

¿De qué trata?

En Seraphim se nos presenta un mundo postapocalíptico que ha sido arrasado por la Enfermedad del Ángel, una misteriosa pandemia que provoca deformidades similares a alas de ángel en el cuerpo de los afectados, además de graves alucinaciones. En un intento de encontrar una cura para esta terrible enfermedad, un grupo de científicos de la OMS protegerán a una niña llamada Sera, que parece ser inmune a esta epidemia que ha provocado tantas muertes.


Nuestra Opinión

La obra encantará a los fans tanto de Satoshi Kon como de Mamoru Oshii, pues contiene características de ambos autores. Por un lado, tenemos la historia oscura y en ocasiones filosófica propia de Oshii, sin olvidar sus simbolismos cristianos e incluso la presencia de un sabueso, como es habitual en muchas de sus películas (por ejemplo Ghost in the Shell, Sky Crawlers...). Y por otra, el estilo de dibujo es 100% Kon, lo cual encantará a aquellos que aprecien sus diseños, aunque tal vez sea cierto que se echa en falta mas de la esencia de este malogrado genio a la hora de leer esta breve obra.

La historia presenta diversos misterios como el origen de la enfermedad, la causa de la inmunidad de Sera... a los que nunca se dan respuesta, debido a que la obra estaba pensada para ser mucho mas extensa, pero debido a ciertas discrepancias entre ambos autores, el proyecto quedó inconcluso, ya irremediablemente a causa del fallecimiento de Kon, siendo este el mayor inconveniente de la obra: lo que se llegó a publicar es prácticamente una introducción, la punta del iceberg de un proyecto que podría haber llegado a ser una de las obras mas importantes de la historia del manga.
Esto decepcionará a muchos que busquen leer una obra completa y bien construida, pues este manga, lejos de estar mal construido, está apenas empezado, y cuando la historia empieza a ponerse interesante para el lector, se cierra con el letrero de "Inconclusa". Así pues, esta pequeña joya casi olvidada, está destinada especialmente a admiradores de la obra de Oshii y de Kon que deseen degustar lo que hubiera podido surgir de una colaboración entre dos mentes de tal magnitud.

En resumen, una obra interesante que nos queda como recuerdo de un proyecto que podría haber sido y nunca será. Es triste pensar que podríamos estar ante una obra maestra del manga y que nunca lo sabremos, pero aun así vale la pena leer estas poco mas de 200 páginas y deleitarse con la breve colaboración entre dos genios.


Nota final: 8,5 [ - Muy Bueno - ]

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